Trabajamos:
•El
desarrollo psicomotor y su autonomía personal
•El
desarrollo del lenguaje y comunicación
•Sus
habilidades para relacionarse con el entorno físico y social
Beneficios:
•Mejora
la capacidad
de concentración, memoria y creatividad del
niño: tres pilares para un buen aprendizaje.
•Impulsa
sus competencias
psicomotoras.
No olvidemos que motricidad y lenguaje van de la mano durante el
neurodesarrollo.
•Facilita
la adquisición
del lenguaje:
articulación del habla, comprensión y expresión oral, capacidad de retener más
vocabulario.
•Despierta
en el niño el interés por explorar y aprender; y, todavía más importante, va
a disfrutar
aprendiendo.
•Establece
las bases para una rutina de trabajo que le ayudará a su inclusión en la etapa
escolar. El niño será mucho más autónomo tanto
en el aprendizaje como en el cuidado personal.
•Favorece
las habilidades
sociales del
pequeño (empatía, asertividad, convivencia…) y su buena adaptación al entorno.
•Y,
sobre todo, refuerza la autoestima.